Maximiliano Martínez se va de La Ciudadela. El lateral izquierdo fue transferido ayer a un grupo empresario que adquirió el 50 % de su pase. Lo confirmó Claudio de Camilo, vicepresidente de San Martín, quien llevó adelante las negociaciones que se cerraron al mediodía de ayer en la secretaría del club de Bolívar y Pellegrini.
“Es una operación ventajosa tanto para el club como para el jugador. ‘Maxi’ nos había pedido que, si llegaba alguna oferta por su pase, hiciéramos el esfuerzo necesario para que se concretara. La transferencia se cerró en una cifra millonaria que nos permitirá afrontar compromisos financieros contraídos”, reconoció De Camilo.
Momentos después a finalizada la transferencia, LG Deportiva se comunicó con “Maxi”, que se encontraba en su casa de Barrio El Progreso de la ciudad de Alderetes, junto a su familia. “Juro que todavía no puedo creer lo que estoy viviendo. Es lo que soñé desde aquel 2008 cuando, tras tres años en Newell’s, decidí volver a Tucumán e incorporarme a San Martín. Esto es el producto de la perseverancia que tuve tras ir pasando etapas, para en cada práctica ponerle todo el esfuerzo para progresar”, contó “Maxi”, sin poder disimular la emoción por estar viviendo un momento inolvidable.
Martínez es sincero al afirmar que, a pesar de haber tenido un buen torneo, no se imaginaba que la transferencia pudiera concretarse en estos momentos. “Estaba recargando las pilas con la mente puesta en volver a practicar en San Martín. No había notado ningún indicio que me hiciera pensar que el pase estaba cerca llegar. Puede ser que por esa causa todavía no puedo tener una real dimensión de lo que estoy viviendo”.
“Maxi” se considera una persona agradecida, por eso en estos momentos de alegría no quiere olvidarse de quienes estuvieron a su lado en “las malas”. “Cuando hace tres temporadas fui a préstamo a Atlético Concepción, creí que se me venía el mundo abajo. Pero qué equivocado estuve en esos momentos... Es que en ese club hicieron que volviera a creer en mis condiciones. También tengo que resaltar el apoyo que recibí de parte de mi familia y de mi novia, que nunca me dejaron bajar los brazos”, dijo el lateral que en los primeros días de enero viajará a Buenos Aires para ponerse a las órdenes de quienes adquirieron su pase.
Merecidamente, a “Maxi” se le abrieron las puertas y en 2015 puede llegar a jugar nada menos que en Nueva Chicago.